La Mano Izquierda de Dios

  En Paraná hoy tuvimos el privilegio de una charla titulada "La Comunicación en la Argentina que viene", dada por Horacio Verbitsky (¡lo que se siente escribir este nombre en el tope de la crónica!)

Verbitsky empezó a hablar acerca del proceso en que Clarín llegó a ser como era. Reflexionó acerca de la conflictiva relación con Alfonsín, continuó con la escaramuza con Menem y el acuerdo que censuró a López Foresi, y habló y habló, de la relación con el principio de Néstor, y habló y habló... de las chicanas en sede judicial, y éso, y la ley de Medios y habló más... Hasta que dijo "Bueno, pero los chicos de Paraná me pidieron que hablara acerca de la comunicación en la Argentina que viene... Bueno, eso no se sabe, éso vá a ser lo que hagamos todos..." Ahí se enteró que la charla se había fusionado con la presentación del libro "La Mano Izquierda de Dios", originalmente programada para el domingo, y se rió: "Bueno, la comunicación de mañana no sé, la de ayer seguro era otra cosa...!"

 Retomó ritmo explicando la serie de libros, del 2006 a hoy, cinco en total, y éste es el último. Acá se relatan cosas de Tortolo, explicó que los religiosos consolaban a los que iban con la consciencia destrozada por asesinar y torutrar y los alentaban: "Es duro, pero es lo que Dios dicta... Es lo necesario, lo inevitable" Bueno, éso hasta las preguntas. Pasaron un par, y entonces pregunté yo: "Y lo de Von Wernich? Que siga siendo sacerdote es una maniobra para no levantar olas ó es un decir que la justicia no les importa, que es un fallo injusto y no acatan la opinión de la autoridad terrenal?" Verbitsky pensó un segundo y contestó "Sí, es lo un buen caso: lo segundo, sin duda... no se les escapa nada. Que es una manera de decir que sus aliados se queden tranquilos, que para ellos todo sigue como era, al fin y al cabo, que la Justicia de Dios es otra cosa... que si un juez, una Corte Suprema, que siguen siendo hombres, condena... ¿qué? Cuál es el problema?

 Y después mucho jugo más, pero bueh, es tarde y estoy cansado...

   Mañana les cuento cómo la Iglesia sembraba archivos para sacarse el lazo del lomo cuando las cosas se dieran vuelta y la Dictadura fuera abiertamente condenable... Son bimilenarios, saben cómo escribir la Historia...