Lo más trágico es que si algo le reconoce la derecha al kirchnerismo es el haber restaurado la autoridad presidencial. Y el salame este, jugandola de "muchachito de la película" en rescate de la secuestrada y maltratada "Institucionalidad Republicana" desbalancea el funcionamiento del PE y sienta precedentes peligrosos para la institucionalidad democrática... y ¡encima, al pedo!!! A partir de los anuncios del Poder Ejecutivo (el de enserio) respecto a la desición de vetar el engendro, todo termina siendo una pose, una impostura por puro designio mediagógico. Encima esta vez no pudo alegar "evitar una guerra civil" ni tampoco alegar "que se lo pidió la hija"... ¿se lo habá pedido Ernestina, preocupada por su futuro, por si pierde Papel Prensa?!
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